James Vicary y su experimento.
Un mensaje subliminal es un mensaje que ha sido diseñado
para pasar por los límites normales de
la percepción. Este mensaje llega al receptor pero este no lo percibe
conscientemente. Puede tratarse de un sonido o de una imagen que el receptor
puede percibir inconscientemente, audible para la mente inconsciente o profunda
pero inaudible para la parte consciente en un breve periodo de tiempo.
Los mensajes
subliminales han sido utilizados a lo largo de la historia con
diversos objetivos, es común verlos en los anuncios publicitarios, en las
películas e incluso en la música.
Los estudios en
torno a los mensajes subliminales comenzaron con James Vicary en 1957. Mostraba
mensajes muy breves diciendo "Bebe Coca-cola" y "Hambre, come
palomitas de maíz" en un cine de Nueva Jersey, luego afirmó que las ventas
de palomitas y Coca-cola aumentaron en un 18 por ciento. A pesar de que más
tarde admitió que era un truco y que el estudio fue demasiado pequeño como para
significar algo, los psicólogos de todo el mundo han tratado de influir en las
personas utilizando mensajes subliminales y los anunciantes supuestamente
siguen utilizando esta técnica para influir en las ventas.
No se ha
demostrado que los mensajes subliminales funcionen en un grado significativo.
Mientras que
los investigadores han sido capaces de demostrar que pueden preparar las
respuestas de
un individuo y estimular una actividad emocional leve en individuos
susceptibles, el consenso entre científicos y psicólogos es que los mensajes
subliminales no producen un efecto duradero en el comportamiento de la persona.
En la
actualidad, más que incluir un mensaje subliminal como todo el mundo se lo
imagina,
con formas extrañas y
demás, se hace uso del simbolismo, es decir, de imágenes que tu cerebro tiene
asociadas, o de colores.
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